Brackets en niños

Es importante saber que el principal factor a tomar en cuenta para la ortodoncia infantil es que el niño debe de haber mudado todos sus dientes de leche y haber obtenido los nuevos. Este proceso se desarrolla en las niñas entre los 10 y 11 y en los niños entre los 12 y 13 años. Es recomendable que a los 6 años los niños tengan su primera visita con el ortodoncista.

A esta edad los dientes definitivos ya están completos y el tejido óseo de la mandíbula ya permite que las piezas dentales se corrijan con mayor rapidez. Otro factor que se toma en cuenta es la estética. Es usual que la ortodoncia sea percibida como antiestética especialmente en la adolescencia o en la adultez, pese a que esto es solo un estereotipo puede causar problemas de baja autoestima.

A menos que un niño que aún cuente con sus dientes de leche sufra de un daño irreversible en sus piezas dentales se puede hacer uso de la ortodoncia. De lo contrario el uso de brackets puede generar problemas en las encías, manchado de dientes o incluso daño en las raíces. 

Brackets en adultos

En la actualidad, el número de personas que utilizan ortodoncia en su edad adulta ha incrementado notoriamente. Pacientes entre 25 y 40 años utilizan este tratamiento debido a que en la infancia no pudieron hacerlo o por el desalineamiento en sus dientes debido a la erupción de muelas del juicio. Incluso los pacientes de 60 años pueden utilizarlos, es importante resaltar que, si cuentan con implantes dentales, la duración del procedimiento sería más larga.

El uso de brackets en la adultez tiene el mismo resultado que utilizarlos en la niñez, aunque en la adultez el dolor es ligeramente más agudo ya que los dientes han permanecido más tiempo sin movimiento. A pesar de que la mejor edad para utilizar Brackets es entre los 10 y los 15 años, nunca es tarde para mejorar tu sonrisa.

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